Qué es la miopía y cómo tratarla

Afecta a ambos sexos, a todas las edades, la miopía es uno de los problemas más comunes de la vista a nivel mundial. Hoy vamos a contarte qué es la miopía y cómo tratarla.

Lo primero que debes tener claro es que la miopía no es una enfermedad, la miopía es un defecto de la refracción de la luz que entra en el ojo, por lo que el enfoque de la luz no se efectúa sobre la retina sino frente a ella. En consecuencia los objetos que están lejos se ven borrosos.

Factores que favorecen la aparición de la miopía

El principal factor que provoca miopía es el hereditario, así, los hijos de padres con miopía tendrán altas probabilidades de desarrollar este defecto de la vista.

Otros factores que influyen en la aparición de miopía son los hábitos personales de cada persona. Estos hábitos perjudiciales para la salud ocular y que pueden provocar la aparición de la miopía son:

  • Trabajar muchas horas delante de un ordenador
  • Pasar poco tiempo al aire libre
  • Leer textos durante mucho tiempo sin descansar la vista

Tipos de miopía

Por un lado tenemos la miopía simple, que es aquella que se corrige con graduación no superior a las 6 dioptrías y que va evolucionando hasta que la persona alcanza los 24 años de edad.

Por otra parte tenemos la miopía magna, conocida también como miopía patológica. Este tipo de miopía es progresiva y puede empeorar a medida la persona se hace mayor. 

La miopía magna es superior a las 6 dioptrías de graduación y puede llegar a presentar situaciones de mayor gravedad tales como glaucoma o desprendimiento de retina.

Señales o síntomas de la miopía

Una de las primeras señales que debe ponerte con respecto a la miopía es si notas ciertas dificultad para enfocar objetos luego de haber cerrado los ojos. Además de eso debes prestar atención a estos síntomas:

  • Necesitas acercarte más a los textos que deseas leer
  • Por la noche no ves bien
  • Te duele la cabeza luego de un período de tiempo leyendo o viendo algo en la TV
  • Te frotas los ojos muy a menudo

El primer paso para prevenir la miopía o frenar su avance es la realización de exámenes de la vista periódicos, estos exámenes oculares deben realizarse al menos cada 2 años y de preferencia desde la etapa escolar.

En el caso de personas con antecedentes familiares de miopía lo más recomendable es acudir al optometrista cada año.

Un optometrista realizará diferentes pruebas para poder confirmar o descartar un diagnóstico de miopía. Destacan entre estas pruebas la tensión o presión ocular y la de refracción.

Soluciones para la corrección de la miopía

En caso de efectuarse un diagnóstico positivo de miopía, el optometrista prescribirá gafas graduadas o lentillas de contacto con las dioptrías necesarias para el paciente.

Lo que se busca con las gafas graduadas y las lentillas de contacto es ofrecer una mejor visión con objetos en la distancia. También existen opciones quirúrgicas que sólo puede ser recomendada por un especialista autorizado.

Otra alternativa a las lentes graduadas tradicionales, las lentillas de contacto o la cirugía son refractiva  son las Lentes Orto-K. Este tipo de lentes de contacto son especiales para la corrección de la miopía y se usan durante la noche mientras el paciente duerme y descansa.

A través de la Ortoqueratología se corrige la curvatura de la córnea durante la noche de manera que el usuario de este tipo de lentillas podrá ir durante el día sin la necesidad de utilizar gafas o lentillas para poder ver bien.

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Nuestro equipo profesional de optometristas estarán encantados de explicarte personalmente qué es la miopía y cómo tratarla. Además, te ofrecerán la mejor solución para el diagnóstico y tratamiento de la miopía.